Corresponde a las personas que han sido condenadas por un tribunal a una pena distinta a la prisión. Existe una diversidad de penas, las que se estructuran a partir de un catálogo establecido en la Ley N° 18.216, en el que es posible distinguir penas de control y penas con intervención psicosocial criminológica, a saber:

a) Penas de control

En este grupo de penas lo principal es la verificación del cumplimiento de condiciones administrativas (firma mensual), restricción de libertad o realización de actividades no remuneradas.

Remisión Condicional que consiste en la sustitución del cumplimiento de la pena privativa de libertad por la discreta observación y asistencia del condenado ante la autoridad administrativa durante cierto tiempo (hasta 3 años).

Reclusión Parcial que consiste en el encierro en el domicilio del condenado o en establecimientos especiales, durante cincuenta y seis horas semanales. La reclusión parcial podrá ser diurna, nocturna o de fin de semana.
Cuando el tribunal dispone que esta pena sea cumplida en el domicilio, contemplará la instalación de un dispositivo tecnológico al penado, que permitirá el monitoreo telemático por parte de Gendarmería de Chile, destinado a verificar el cumplimiento de la reclusión dentro los horarios y lugar preestablecidos.

Prestación de Servicios en Beneficio de la Comunidad que consiste en la realización de actividades no remuneradas a favor de la colectividad o en beneficio de personas en situación de precariedad, coordinadas por un delegado de Gendarmería de Chile, las que semanalmente no podrán exceder de 40 horas.
Para la ejecución de esta pena se gestionan convenios que permiten disponer de plazas para el desempeño de las actividades no remuneradas por parte de los penados. Como referencia, al 2021, existen 1.210 convenios a nivel nacional, que aportan un total de 9.565 plazas.

b) Penas con intervención psicosocial criminológica

Si bien este grupo de penas considera controles administrativos, lo distintivo y principal es que considera el diagnóstico del sujeto a través de instrumentos, la ejecución de un Plan de Intervención Individual y la reevaluación periódica para la medición de los resultados y ajuste de la intervención. Este proceso se basa en el Modelo de Riesgo, Necesidad y Responsividad, orientado a la modificación de los factores de riesgo asociados a la conducta delictual de su población beneficiaria.

Libertad Vigilada que consiste en someter al penado a un régimen de libertad a prueba que tenderá a su reinserción social a través de una intervención individualizada, bajo la vigilancia y orientación permanente de un delegado de Gendarmería de Chile.

Libertad Vigilada Intensiva que consiste en la sujeción del condenado al cumplimiento de un programa de actividades orientado a su reinserción social en el ámbito personal, comunitario y laboral, a través de una intervención individualizada y bajo aplicación de ciertas condiciones especiales. En esta pena el tratamiento es de mayor intensidad y duración de que en la anterior.
En el caso de delitos que involucren violencia intrafamiliar, delitos sexuales o en casos de Pena Mixta, el penado deberá estar sujeto a monitoreo telemático, el que se efectuará a través de la instalación de un dispositivo tecnológico, destinado a controlar que no se acerque a la víctima, previniendo conductas de riesgo para ésta. Siempre que la víctima lo acepte, ésta también podrá contar con un dispositivo como mecanismo de salvaguarda para su seguridad.

c) Expulsión de personas extranjeras

Para personas condenadas y que no cuenten con residencia legal en el país, por lo que no es una pena de control y tampoco de intervención.

Para la ejecución de estas penas y favorecer la reinserción social de quienes están afectos a ellas, Gendarmería de Chile cuenta con 2 programas con recursos otorgados por Ley de Presupuesto de la Nación, orientados a las personas que cumplen condenas en libertad.

Para favorecer la finalidad de la condena, cual es la reforma y reinserción social de las personas, Gendarmería de Chile cuenta, en consonancia con el Modelo de Intervención, con los siguientes programas para las personas con penas sustitutivas:

Programa de Intervención y/o Control de la Población Penada Sujeta a la Ley N° 18.216

Este programa tiene por objetivo favorecer la reinserción social de los penados, a través del control y/o intervención de la población sujeta a la Ley N°18.216 y Ley N°20.603. Su población objetivo corresponde a personas que cumplen condena en alguna de las Medidas Alternativas a la Reclusión o de las Penas Sustitutivas de Libertad Vigilada, Libertad Vigilada Intensiva, Remisión Condicional, Reclusión Parcial y Prestación de Servicios en Beneficio de la Comunidad. El control y/o intervención llevados a cabo en este programa se realiza en los 41 Centros de Reinserción Social (CRS) en funcionamiento en las 16 regiones del país. Como referencia, a septiembre de 2021, la cantidad de atendidos por este programa es de 50.464 personas.

Programa de Intermediación Laboral en el Sistema Abierto

Este Programa está orientado a la reinserción laboral de los penados con medidas alternativas o con penas sustitutivas de Libertad Vigilada, Remisión Condicional, Reclusión Parcial o PSBC. Es ejecutado dentro de los Centros de Reinserción Social (CRS) por profesionales que - previo diagnóstico - derivan a los penados a uno de los dos (2) componentes de intervención que existen: “Capacitación y/o Apresto Laboral” y “Colocación Laboral Independiente o Dependiente”. Las necesidades de capacitación son abordadas principalmente a través de financiamiento entregado por SENCE o gestionadas localmente, mientras que las necesidades de colocación laboral son abordadas a través de convenios de cooperación entre Gendarmería de Chile y entidades públicas o privadas, para obtener puestos de trabajo o apoyo al auto-emprendimiento. Las prestaciones de reinserción laboral se entregan en 41 Centros de Reinserción Social, ubicados en las 16 regiones del país. Como referencia, a noviembre de 2021 el programa ha intervenido a 1.215 personas.

Monitoreo Telemático

Es un mecanismo de control, mediante el uso de medios tecnológicos, destinado a la supervisión de la Reclusión Parcial y Libertad Vigilada Intensiva (incluida Pena Mixta), en tanto permite localizar al condenado, para detectar si se incumplen las restricciones de movilidad establecidas por resolución judicial, para el cumplimiento de la pena impuesta dentro del territorio nacional. Sus principales beneficios están relacionados a la disminución del riesgo de contagio criminógeno en establecimiento penitenciario y proporciona eventualmente protección tecnológica a la víctima ante eventuales incumplimientos del condenado. El control telemático inició su aplicación y ejecución en septiembre del año 2014 y considera la externalización del servicio que aporta la tecnología necesaria.

Las etapas principales del monitoreo son:

El Informe de Factibilidad Técnica es solicitado en la etapa de investigación por el fiscal, el abogado defensor o el tribunal en subsidio, a Gendarmería de Chile, a través de su Departamento de Monitoreo Telemático, el que remitirá el Informe dentro 15 días.

La Instalación se realiza en un Centro de Reinserción Social previa coordinación de Gendarmería de Chile y es gratuito para la persona condenada.
El período de control con monitoreo telemático se inicia con la instalación y activación del dispositivo de control. Tiene una extensión de acuerdo a lo indicado en la resolución judicial, período en que Gendarmería de Chile debe informar a los tribunales, los incumplimientos de los penados si los hubiere.

Para el caso de la Libertad Vigilada Intensiva con monitoreo telemático y víctima asociada, se trabaja en conjunto con la Central de Comunicaciones de Carabineros de Chile (CENCO) y, en el caso de activarse una alarma por incumplimiento, se activa el protocolo establecido para esa situación.
La Desinstalación procede tras el término del periodo de control, de acuerdo a lo indicado por el tribunal. El dispositivo será retirado en las dependencias de un Centro de Reinserción Social.